Centro de Evaluación Rosario se presentó ante el Consejo Regional de O’Higgins
El Centro de Evaluación Rosario, CER, se presentó ante la comisión de Agricultura del Consejo Regional de O’Higgins, para mostrar el trabajo que realizan en la región. El encargado de exponer fue su director ejecutivo, José Miguel Figueroa, quien aseguró que el CER es una empresa de carácter privado que está reconocida por el Servicio Agrícola y Ganadero, cuyos desafíos son captar las necesidades de los productores, potenciar la inocuidad de las cosechas y apoyar la trasferencia tecnológica.
De esta forma, Figueroa nombró algunos ejemplos en los que el CER ha apoyado con su conocimiento como en el desarrollo de alternativas de manejo de la Monilia fructicola (enfermedad que afecta a los carozos), en el catastro de daño de las heladas y en la generación de recomendaciones de control de la Lobesia botrana (polilla del racimo de la vid), entre otros.
Finalmente, el profesional aseguró que aunque su financiamiento es privado, hay algunos proyectos que les gustaría postular a fondos públicos en el futuro, esto con el objetivo de seguir potenciando a la Región de O’Higgins en su vocación agroalimentaria y agroexportadora.
“Creo que es fundamental informar proyectos de este tipo donde estamos captando y trabajando continuamente con los productores, además de buscar soluciones en conjunto para sus necesidades”, expresó Figueroa y agregó que el financiamiento estatal sería importante para generar herramientas enfocadas a los agricultores más pequeños. Por otra parte, la presidenta de la comisión, la consejera Cristina Marchant, señaló que “nos hemos dado cuenta que es un centro abierto, ingresas a la página (www.cerosario.cl) y puedes encontrar información de las más de cien investigaciones que tienen concluidas al momento. Sin embargo, todavía no hemos logrado que ésta llegue a todos los usuarios, por lo que el gran desafío que tenemos es apoyar este centro”.
Asimismo, el consejero regional Mauricio Donoso recalcó que el CER es una institución que puede ayudar a potenciar la agricultura, sobre todo en el correcto uso de los pesticidas. “Lo ideal sería trabajar en la línea de certificar a los pequeños agricultores, enseñarles cuál es el camino, que muchas veces es más barato de lo que están aplicando, para que lleguen con un producto al nivel fitosanitario idóneo que no sea perjudicial a la salud”, manifestó.